Mi edad...

Soy joven aún para temerle a mis dos cifras, pero soy la indicada para darle el valor que merecen, tengo mucho que aprender, pero aún mucho más que mostrar, tengo el extraño don de encontrar belleza en cada centímetro de este mundo, encontrar bondad hasta en el más oscuro sentimiento. Marcando la diferencia en el pensamiento joven, muchos más hay como yo, cada uno con una visión distinta a la cotidiana. Todos nos complementamos y nos intimidamos. No sigamos huellas anteriores, descubramos nuestros caminos, avancemos libremente por el sendero oculto. Observando a través de mis cristales la maravillosa dicha de una sonrisa traviesa, el despertar de los colores de un rayo de sol… Que encantador es vivir… No hay criatura que nazca sabiendo, pero debes nacer nuevamente al encontrar la razón de tu existir.

Mi edad… Se compone por casi dos décadas… Pero mi entusiasmo por vivir comenzó cuando descubrí el significado de deslizar un bolígrafo… Cada curva en el papel, escrita por mi lápiz, cada suspiro de emoción al agregar una línea más a mis escritos, el agrado que sentí al llevar un cuaderno sin fin en mi… Tengo diecinueve años y descubrí un mundo lleno de emociones a los once.